Es una conjuntivitis crónica recurrente causada por la bacteria Chlamydia tracomatis. Se transmite por contacto directo persona a persona o por contacto indirecto con toallas o diferentes fómites o con fluidos conjuntivales de una persona infectada, así como por vectores mecánicos como moscas que llevan la infección de persona a persona. El tracoma representa la primera causa de ceguera infecciosa a nivel mundial y es totalmente prevenible; esta puede ocurrir después de repetidas infecciones durante la infancia, secundaria a entropión (inversión patológica de las pestañas que lesiona la córnea y ocasiona cicatrización tarsal); se manifiesta entre los 30 y 40 años de edad, es más frecuente en mujeres que en hombres por su cercanía con los niños. El tracoma es asociado con la pobreza, hacinamiento, la falta de acceso al sistema de salud y a condiciones inadecuadas de saneamiento básico e higiene personal. (PAHO, 2009).
Hasta septiembre del año 2010 se había documentado la presencia de focos activos de tracoma en tres países en las Américas: México, Guatemala y Brasil, abarcando en total 30 unidades administrativas lo cual lleva a estimar que alrededor de 50 millones de personas en la región viven en áreas de riesgo para esta enfermedad (Schneider, Aguilera, Barbosa da Silva Junior, Ault, Najera, & al., 2011) (PAHO, 2010). En Brasil, en la zona que limita con el departamento colombiano del Vaupés; en varias comunidades indígenas de la familia Makú en la región del Río Negro, esta detectado desde el año 2001 un foco activo de tracoma.
Las prevalencias estimadas de tracoma en niños y niñas de 1 a 9 años de edad fueron superiores al 50% para el año de detección (Ximenes, Medina, & Velasco-Cruz, 2001). Esta fue la ruta por la cual ingresó de este problema de salud pública a nuestro país ubicándose en la Región Orinoco-Amazonas, que comparte las mismas características y determinantes sociales de salud que el área homónima del Brasil.
En nuestro país, en el año 2006 se encontró evidencia clínica de presencia de tracoma en comunidades indígenas del oriente del departamento de Vaupés, en zonas limítrofes con Brasil (Miller, Gallego, & Rodriguez, 2010). Posteriormente, en el año 2011 se confirmó el diagnóstico etiológico por medio de pruebas de PCR estandarizadas en el Instituto Nacional de Salud (INS) y en el año 2012 se realizó un censo para levantar la línea de base de la prevalencia en la región oriental del departamento cobijando un total de 86 comunidades. Los resultados del estudio mencionado ubican el foco que aún no se ha delimitado, en niveles de hiperendemia con 30,4% de prevalencia de formas activas de tracoma en menores de 1 a 9 años de edad, hay 59 personas (10,2 x 1.000 habs) con triquiasis tracomatosa (TT) y 28 personas (5 x 1.000 habs) con opacidad corneal (OC).
Colombia, entrenador en diagnósticoclínico de tracoma ocular