· La creación del registro de pacientes se llevará a cabo a partir del 1 de julio
Bogotá, abril 24 de 2012.- “Con los biomedicamentos lo que queremos desde el Ministerio de Salud y Protección Social, en todos los casos, es buscar calidad, seguridad y eficacia para los pacientes dentro de un proceso riguroso de fármaco vigilancia”, afirmó la Ministra Beatriz Londoño Soto en el marco del cuarto foro de la Asociación Nacional de Profesiones de la Salud (Assosalud) denominado ‘El ABC de los medicamentos biotecnológicos’.
Beatriz Londoño Soto fue enfática en señalar que se creará a partir del 1 de julio el Registro Único Nacional y confidencial de pacientes en el uso de los biomedicamentos.
“El propósito es hacer un seguimiento pormenorizado del medicamento autorizado en Colombia para que los pacientes puedan tener una mejor vigilancia respecto al desenlace terapéutico, pueda asegurar que no existan baches en los tratamientos y porque esto nos muestra cómo se va modificando una enfermedad desde el punto de vista epidemiológico”, dijo.
La titular de la cartera de salud manifestó que ese registro “deberá llevar un reporte permanente, con información muy precisa, y con la debida confidencialidad que los pacientes requieren, ameritan y que nosotros debemos asegurarles”, agregó.
Londoño Soto declaró que existen siete puntos fundamentales para Colombia en materia de biomedicamentos que se coordinan desde el Ministerio de Salud y Protección Social. El tema de precios “se excluye inicialmente para que la discusión no mezcle el tema técnico con el comercial sin que esto signifique que no tiene relevancia”, destacó.
Dentro de los puntos fundamentales que trabaja la cartera de salud están los siguientes:
Primero: Una normatividad clara que le asegure al paciente calidad, seguridad y eficacia donde haya estricta farmacovigilancia por parte del Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (INVIMA) y de los médicos.
Segundo: Privilegiar a los pacientes con los mejores tratamientos posibles
Tercero: Regirnos por las normas de la Organización Mundial de la Salud en relación con las buenas prácticas de manufactura y guías de estabilidad de los medicamentos.
Cuarto: Generar un Registro único Nacional de Pacientes para un seguimiento seguro, detallado y con la mayor información posible.
Quinto: Todas las organizaciones son bienvenidas a discutir sobre el proyecto de decreto de biomedicamentos, guardando los rigores técnicos, y que los invitamos cordialmente a participar de la segunda fase que se iniciará la tercera semana de mayo.
Sexto: Las discusiones de precios y de propiedad intelectual deben evitar que mezcle el tema técnico con la comercialización.
Séptimo: Parte del componente ético de los médicos es la prescripción sobre la mayor evidencia técnica posible para garantizar tratamientos y terapias efectivas.