Bogotá D.C., 17 de febrero de 2025. El Ministerio de Salud y Protección Social denuncia públicamente el atentado ocurrido en las últimas horas, contra los miembros de una ONG Médica internacional y los funcionarios de la E.S.E. Suroccidente del Cauca, a escasos metros de la entrada del hospital provisional de campaña del corregimiento de El Plateado, municipio de Argelia, Cauca.
Según la información confirmada en territorio, se trató de un artefacto explosivo de bajo poder, el cual fue lanzado hacia la carpa principal del hospital. El ataque dejó como consecuencia varias heridas leves en una de las trabajadoras de la E.S.E. quien fue impactada por esquirlas provenientes del artefacto explosivo. La funcionaria fue atendida a tiempo y se encuentra fuera de peligro. Otras esquirlas generaron múltiples afectaciones en la carpa que compone la fachada externa del hospital.
La zona que rodea al corregimiento de El Plateado es actualmente blanco de enfrentamientos entre diversos grupos armados, los cuales NO están respetando a la misión médica. El Ministerio de Salud y Protección Social exige a todos los actores presentes en el territorio garantizar el libre acceso y movilización de médicos, enfermeras, y todos aquellos que componen los diversos equipos de la salud a las zonas de conflicto armado. Todo esto con el fin de salvaguardar este derecho fundamental a la población civil.
Colombia ratificó los Convenios de Ginebra, los cuales son un conjunto de acuerdos que establecen normas de protección para las personas en situaciones de conflicto armado, como son:
Proteger a las personas civiles en tiempo de guerra.
Proteger a los heridos y enfermos de las fuerzas armadas en campaña.
Proteger al personal médico en situaciones de conflicto armado.
No atacar a los profesionales de la salud por ejercer su profesión en situaciones de conflicto armado.
No obligar a los profesionales de la salud a realizar actos que vayan en contra de la deontología o de las normas médicas.
Todos los heridos y enfermos deben ser tratados humanitariamente y deben recibir los cuidados médicos que requieran, en la medida de lo posible y en el plazo más breve que se pueda.
Esta hoja de ruta debe ser respetada y acatada por todos los actores amados del conflicto, para garantizar la acción eficiente y oportuna de las misiones médicas en toda Colombia.
Colombia tiene quien la cuide