Bogotá, 22 de noviembre de 2020 – Aunque las pruebas son un componente del Programa dirigido por el Ministerio de Salud y Protección Social, los aspectos de mayor relevancia dentro del PRASS son el rastreo y el aislamiento oportuno, convirtiéndose en importantes desafíos a superar con celeridad.
"Rastrear es ubicar rápidamente todos los sospechosos o probables de covid-19 y aislarlos de inmediato para limitar la transmisión del virus, lo que requiere escalar 10 veces los esfuerzos de rastreo de contactos que ya se vienen adelantando, ampliando el alcance con rastreo masivo y sistemático de manera telefónica y presencial, en caso de ser imposible hacerlo por teléfono", precisó Julián Fernández, director de Epidemiología y Demografía del Ministerio.
El proceso comienza desde el momento en que se identifica un caso sospechoso o probable y se procede a levantar el mapa de contactos estrechos de este. El número de contactos por caso depende del perfil ocupacional del caso, del momento de la pandemia y de la densidad de sus cadenas de transmisión, y se determina a partir de la reconstrucción del mapa de contactos de cada caso.
Este levantamiento de información se realiza mediante comunicación directa con el caso, siempre protegiendo y respetando la privacidad y confidencialidad de la información. Durante el rastreo no se debe informar a los contactos sobre la identidad del caso que originó el riesgo.
Rastreo telefónico
Fernández aseguró que el rastreo telefónico "es el método ideal teniendo en cuenta la rapidez para el acceso a la información, la relación costo-beneficio y el cumplimiento de las medidas de bioseguridad". Está a cargo del contact center del Centro de Contacto Nacional de Rastreo, el centro de contacto de las EAPB y el de la entidad territorial de salud.
El CCNR está conformado por rastreadores telefónicos, quienes se encargan de contactar a todos los casos sospechosos o probables para recolectar información necesaria sobre estos y sus contactos con base en el 'Formulario de Rastreo Telefónico de Casos Confirmados y Sospechosos/Probables' y su respectivo protocolo de comunicación, diseñados por el Instituto Nacional de Salud.
En la llamada, además de impartir instrucciones precisas para el aislamiento, se levanta la información de todos los convivientes y todos aquellos con los que se tuvo contacto desde dos días antes del inicio de los síntomas, especificando:
1. Con quiénes estuvo a menos de dos metros de distancia por más de 15 minutos sin uso de tapabocas, adultos mayores, personas con comorbilidad, personas de alto valor por su ocupación en la emergencia y los de alta movilidad. Estos contactos son clasificados en riesgo alto.
2. Contactos con los que interactuó con tapabocas por más de 15 minutos en un lugar cerrado o más de dos horas en otros espacios, quienes son clasificados en riesgo medio.
3. Personas con las que tuvo contacto en espacios abiertos, ya sean encuentros esporádicos, con uso constante de lavado de manos y distanciamiento físico, clasificados en riesgo bajo.
Posteriormente, el CCNR llama a todos esos contactos que hayan sido clasificados como riesgo medio y alto, registrándolos con base en el Formulario. Se indaga sobre sus condiciones particulares en relación con el aislamiento, determinando las posibles necesidades para su cumplimiento, y se les entregan las instrucciones para que lo inicien.
Los contactos clasificados como riesgo bajo solo serán contactados y aislados por el CCNR una vez se haya determinado que el caso sospechoso/probable fue confirmado como positivo mediante una prueba.
"La información de todos los contactos se reporta a la plataforma Segcovid, donde se realiza un proceso de validación y se informa automáticamente a cada una de las EAPB la lista de contactos que sean sus afiliados con el propósito de que se encarguen de su gestión y seguimiento", indicó el director de Epidemiología y Demografía.
Si los casos sospechosos/probables, confirmados y contactos que se identifiquen mediante este procedimiento no se encuentran asegurados, es informado de inmediato a la entidad territorial para que proceda a su afiliación en el régimen subsidiado. De no lograrlo, la entidad territorial hace el respectivo seguimiento.
Rastreo presencial
Cuando se trata de una persona que se encuentra en un lugar de difícil acceso a comunicación telefónica o por alguna razón el CCNR no logra contactarse, se remite el caso o contacto para visita presencial.
Los rastreadores de campo, ya sea del ente territorial o de las EAPB, realizan una visita presencial guardando todas las medidas de bioseguridad. En ella se levanta la información siguiendo el mismo protocolo para contacto telefónico.
La información se recoge en campo directamente desde sus dispositivos móviles en CoronApp Pro/Médicos, aplicación que puede funcionar sin conexión a internet para viabilizar su uso en lugares remotos y una vez cuenta con servicio de datos alimenta directamente la plataforma de información centralizada (Sivigila y Segcovid) al igual que lo hace el CCNR; con esto se garantiza que la gestión y seguimiento del caso continúe por parte de la EAPB correspondiente.
De igual manera, el equipo de rastreo en campo imparte las instrucciones para el aislamiento y determina potenciales necesidades de apoyo económico o de alojamiento para tal efecto. Esta información es procesada de manera centralizada y posteriormente se entrega a los actores encargados de tomar las acciones pertinentes en cada caso.
El ente territorial tiene la responsabilidad de hacer rastreo, mapa de contactos y seguimiento a casos en la población no afiliada, pero, adicionalmente, en el marco de su labor de inspección, vigilancia y control, tiene la responsabilidad de verificar que lo mismo se ha hecho con la población afiliada por las EAPB.
Cada EAPB es responsable de hacer seguimiento frecuente a la evolución del estado de salud de cada uno de los contactos que se convirtieron en casos sospechosos/probables afiliados y su núcleo familiar, tomar pruebas si así lo considera necesario, prestar asistencia médica y hacer seguimiento al cumplimiento del aislamiento.
Además, "el CCNR hará un monitoreo a una submuestra para verificar que las EAPB cumplan con sus responsabilidades de seguimiento y monitoreo clínico, y adicionalmente verificará la proporción que cumpla con el aislamiento en casa", concluyó Fernández.