- El Viceministro de Salud Pública y Prestación de Servicios, Fernando Ruíz Gómez, reiteró que un gran paso en educación en salud es la necesidad de un matrimonio indisoluble entre las es-cuelas de medicina y los hospitales en el marco del Sistema de Garantía de Calidad.

Bogotá, D.C., 13 de mayo de 2014.  Durante la instalación del simposio ‘Hospital Universitario: Retos y Experiencias’ organizado por el Hospital Militar Central, el Viceministro de Salud y Prestación de Servicios, Fernando Ruiz Gómez, describió la situación actual de los hospitales del país y explicó la necesidad que exista un matrimonio indisoluble entre las escuelas de medicina y los hospitales en el marco del Sistema de Garantía de Calidad para que puedan obtener su acreditación como tal.

Ruiz Gómez contextualizó a los asistentes sobre el desarrollo del sistema de salud desde 1993, la universalización de los servicios, los problemas de acceso relacionados con las limitaciones de los servicios primarios que no han sido totalmente resolutivos frente a las necesidades de la población y, por consiguiente, se ha generado la presión de la demanda en la alta complejidad, para expresar que en el escenario actual el binomio Universidad-Hospital es un desafío para las instituciones que esperan ser acreditadas como hospital universitario.

“Necesariamente tenemos que dar un paso adelante en salud y educación, porque desde nuestra cartera buscamos la consolidación de la formación de los profesionales que se base en un matrimonio indisoluble entre la escuela de medicina y el hospital. Se generaron algunos incentivos económicos legítimos pero cerraron la puerta de formación de escuela, universidad y centro de práctica”, expresó.

Explicó que la tarea es contar con una formación entre la universidad y el hospital con características especiales, “donde el centro sea el servicio y la educación el núcleo enmarcados dentro de las leyes 1164 y 1438”.

Al preguntarse cuántos hospitales universitarios debería tener el país, consideró que el Gobierno aspira en el futuro a un número que estaría entre los 25 y 30, que sean grandes formadores y se transformen en el ámbito de estas dos leyes.

Ruíz Gómez también mencionó los tres factores clave para aquellos que quieran  ser catalogados como hospitales universitarios. Un hospital universitario debe ser un excelente centro de servicios y eso se obtiene a través de la acreditación de alta calidad. Un segundo aspecto es que tenga excelencia en formación, con convenios establecidos con universidades y se consolide como escuela. Y tercero, que tengan elementos sustanciales en materia de investigación.

Describió que en Colombia ya están reconocidas tres instituciones de salud como hospitales universitarios que marcan el camino y una ruta para seguir. “Tenemos cuatro instituciones adicionales que están en proceso de evaluación, otras que están preparando para conformarse como tal y ese es el futuro. No obstante, no podemos decir en los próximos diez años que la formación esté sustentada en una relación económica para abrir cupos de práctica”.

Por último, el Viceministro manifestó la relevancia que tiene el Hospital Militar Central para el país, porque es una institución que por su naturaleza es un gran proveedor de subespecialidades, de las cuales podría convertirse en gran formador en esos campos. “Celebramos que avancen en el camino de la acreditación porque nuestros grandes centros públicos como el Dermatológico y el Cancerológico tienen que entrar en la senda de transformación de hospitales universitarios y centros de investigación”.

Por su parte, el Mayor General Luis Eduardo Pérez, Director General del Hospital Militar Central, declaró que su institución busca la acreditación en salud para seguir los pasos el Hospital Pablo Tobón Uribe, la Fundación Santa Fe de Bogotá y la Clínica Cardiovascular de Floridablanca, porque su desafío es cumplir con los requisitos establecidos para tal fin.

Al simposio asistieron, entre otros, representantes de la Fundación Santa Fe, la Universidad Nacional de Colombia, del Hospital la Samaritana, del Ministerio de Defensa, Educación y de la Asociación Colombiana de Facultades de Medicina.