Bogotá, 23 de septiembre de 2011. Una de las medidas para proteger la salud y mantener hábitos de vida saludables es disfrutar de ambientes libres de humo de tabaco y sus derivados. Por esto, que el Ministerio de la Protección Social, a través de la Dirección General de Salud Pública, elaboró un decálogo con recomendaciones para la protección de la salud de los colombianos.
Las medidas que se proponen son:
1.- Libere su ambiente del humo de tabaco: Libere su casa y su auto de humo, visite restaurantes y lugares públicos libres de humo, pídale a la gente que no fume cerca a usted ni a sus hijos.
2.- ¿Cómo proteger nuestros hijos del humo de tabaco ajeno?: No permita que nadie fume cerca a su hijo, no fume ni permita que otros fumen en su casa o en su automóvil, abrir las ventanas no va a proteger a sus hijos del humo, llévelo a una guardería libre de humo, no lo lleve a restaurantes ni a otros lugares cerrados públicos que permitan fumar; enséñele a los niños mayores a alejarse del humo de segunda mano.
3.- Podemos ir a diversos lugares sin correr riesgos: Elija restaurantes y bares libres de humo, que cumplan esta prohibición hágales saber a los dueños de los establecimientos cuando no se respeten los lugares libres de humo, que el humo le molesta y le enferma. Denuncie la infracción ante la policía y las secretarias de salud de su municipio.
4.- El médico también puede ayudar: Preguntando a los pacientes si fuman y si viven en un ambiente de humo de segunda mano, aconsejándolos a que si fuman dejen de hacerlo y ayudándolos para que lo logren, que no fumen cerca de otros, aconsejando a los no fumadores a que se cuiden evitando todo humo de segunda mano, ó humo de tabaco ambiental y que protejan a sus hijos de este humo.
5.- Ninguna cantidad de humo de segunda mano es sano: Usted puede respirar humo de segunda mano todos los días, al sentarse en la sección de “no fumar”, aunque no huela a humo; al estar en un auto cuando alguien más está fumando, aunque la ventanilla esté abierta; al estar en una casa donde hay gente fumando, aunque esté en otra habitación; al trabajar en cualquier restaurante, almacén o edificio en el que se permita fumar, aunque haya un filtro o un sistema de ventilación.
6.- Fumar no es asunto de niños como tampoco debiera ser de los adultos: Fumar no es asunto de niños como tampoco debería de ser de los adultos. Mi libertad de elegir fumar y el riesgo que implica para la salud van hasta donde comienza los derechos de las personas no fumadoras, especialmente de los niños y jóvenes de disfrutar de un ambiente sano libre de humo de tabaco. Ningún adulto debe fumar delante de un menor de edad, ya que su organismo es tan delicado que se afecta fácilmente y lo hace más propenso a las enfermedades respiratorias, tos, flemas y ruidos en el pecho. Además, porque el pequeño pensará que si lo hace el adulto, él también lo puede hacer.
7.- Soy joven saludable y pienso conservarme así: Las personas jóvenes que logran llegar a los 15 años sin probar los productos de tabaco tienen posibilidad de no ser fumadores en toda su vida, por ello es parte de su autocuidado evitar esta adicción.
8.- Cuidar el ambiente es una responsabilidad de todos: Proteger al ambiente de la contaminación producida por el humo del tabaco debe es un compromiso de todos; su hijo tiene derecho a respirar aire puro. Cada día, el medio ambiente global se ve afectado por amenazas causadas por la actividad humana, y consumir tabaco o sus derivados es una gran fuente de contaminación para el planeta. Alrededor del mundo hay 700 millones de niños que respiran aire contaminado por humo de tabaco. El 40% de ellos, tiene al menos un progenitor fumador.
9.- El mejor regalo para mi futuro bebé, no fumo ni fumaré: Cuide su hijo incluso antes de nacer, el humo del tabaco daña a los bebés antes y después de nacer. Se daña a los bebés no nacidos cuando sus madres fuman o si alguien fuma cerca de sus madres. Los bebés también pueden respirar humo de segunda mano después de nacer. Ya que sus cuerpos están en desarrollo, los venenos del humo dañan al bebé mucho más que a los adultos. Los bebés menores de un año de edad son quienes más peligran.
10.- Los ambientes libres de humo son un derecho: Todos debemos trabajar activamente para lograr ambientes libres de humo. Esta es una campaña de toda la comunidad y hace parte del control social para educar a toda la población.
Seguir estas indicaciones y mantener una alimentación que incluya cinco porciones de frutas y verduras al día, así como acumular mínimo 150 minutos de actividad física a la semana si es mayor de 18 años, permitirán tener buenos hábitos saludables.