El giro de los recursos es una de las cinco medidas contempladas en el plan de choque por $488 mil millones anunciado por el presidente Iván Duque a mediados de este mes, para darle mayor liquidez al sistema de salud de los colombianos y facilitar el saneamiento de pasivos en el sector.
Con estos dineros, las IPS beneficiadas dispondrán de un mayor flujo de recursos para cumplir con sus obligaciones antes de finalizar 2018 y prestar una mejor atención en salud a los ciudadanos.
De otra parte, como lo informó el Presidente en su cuenta de Twitter, “se ha firmado la resolución que permite asignar $20 mil millones a 25 entidades departamentales y distritales para la atención en salud de 72 mil migrantes". Estos recursos, otra de las medidas definidas en el plan de choque, cubrirán los gastos por atenciones de urgencia prestadas en Colombia a los ciudadanos de otros países.
Los dineros serán desembolsados a la red pública hospitalaria. Para distribuirlos se tuvo en cuenta el número de atenciones históricamente reportado, dando prelación a las ubicadas en las zonas de frontera.
Las otras tres medidas de la estrategia de choque son el pago de glosa transversal de recobros saneada y certificada por $63 mil millones, el pago previo de recobros por $225 mil millones y la destinación de $100 mil millones para una línea de crédito blando de Findeter a la que podrán acceder las EPS e IPS para cumplir con sus obligaciones financieras.
La inyección de los $488 mil millones al sistema de salud evidencia el compromiso del Gobierno Nacional en obtener mayor acceso y calidad de los servicios para los colombianos, una de las prioridades del gobierno para lograr la equidad.
Lo anterior se suma a grandes esfuerzos como la adición de $780 mil millones que se requerían para cerrar el funcionamiento de la seguridad social en salud de 2018, y la adición aprobada por $3,8 billones para la vigencia 2019 de los cuales $3,6 billones serán para el aseguramiento en salud y $200 mil millones para apoyo a programas de desarrollo de la salud para el financiamiento de hospitales y la apropiación del enfoque diferencial en la atención en salud y promoción social.
Con lo anterior se alcanzan $32,3 billones del presupuesto general de la Nación para la vigencia 2019, una de las asignaciones más elevadas en los últimos tiempos.