
Una nueva etapa de desafíos para el sector salud comienza hoy en 
Mocoa. Después de la atención inicial prestada a las más de 200 personas
 heridas como consecuencia de las inundaciones, y tras la remisión de 40
 de estas a Neiva y 28 a Popayán, los retos se concentran en garantizar 
la atención permanente en los albergues y la prevención de brotes en la 
zona del desastre.
En su visita de hoy a la 
capital del Putumayo, el ministro de Salud y Protección Social, 
Alejandro Gaviria Uribe, informó que media tonelada de medicamentos ya 
había sido trasportada al municipio, por lo que se realizaría una nueva 
evaluación para cruzar las necesidades satisfechas con las insatisfechas
 en materia de salud.
Así mismo, el ministro 
anunció que mañana (lunes 3 de abril) llegarán a Mocoa tres expertos en 
gestión del riesgo del Instituto Nacional de Salud (INS), que se 
concentrarán en el desarrollo de un plan para prevenir brotes 
infecciosos. 
Según el titular de la salud, uno
 de los mayores desafíos en este momento es la adecuación, en 
coordinación con el Instituto de Medicina Legal, de una morgue para dar 
un correcto manejo a los cadáveres. Se espera que la planta eléctrica 
para el cuarto frío llegue mañana al lugar. 
El
 reporte entregado por el Presidente de la República, Juan Manuel 
Santos, hacia el mediodía de hoy indicaba que la cifra de personas 
fallecidas había ascendido a 210, y el de heridas se mantenía en dos 
centenas.
En la tarde, el ministro de Salud y 
el viceministro del ramo Luis Fernando Correa visitaron el puesto de 
salud instalado en el albergue temporal del Instituto Tecnológico de 
Putumayo (ITP), que es atendido por ocho médicos del Ejército, cuatro de
 la Patrulla Aérea, cuatro de la Cruz Roja y cuatro voluntarios. El 
propósito es concentrar a los damnificados en tres albergues, instalar 
un puesto de salud en cada uno y distribuir a los profesionales de la 
salud en ellos.
En su visita, el ministro 
también constató el funcionamiento de la planta eléctrica y el 
suministro de agua potable en el hospital Jesús María Hernández. A raíz 
de la tragedia, el Gobierno se comprometió a acelerar las obras del 
nuevo hospital de la ciudad, cuya construcción estaba prevista desde 
antes del desbordamiento de los ríos.
El 
titular del Ministerio de Salud asimismo anunció que personal de la 
cartera se desplazará a Mocoa para tramitar lo más rápido posible el 
pago de los 18,4 millones de pesos que las familias recibirán del Fondo 
de Solidaridad y Garantías (Fosyga) como indemnización por cada persona 
fallecida. 
Hoy nuevamente Gaviria Uribe 
resaltó la solidaridad de la gente y “el trabajo mano a mano” de los 
diversos actores del sistema de salud. “Médicos y enfermeras de todo el 
país, de la industria farmacéutica, de todo el mundo nos están 
preguntando cómo colaborar”, puntualizó.